Hace unos días salía yo de la piscina cuando me encontré un chico gallego con el que suelo coincidir allí.
Siempre nos saludamos y hacemos algún comentario superficial para no parecer descorteses, como ¿Todo bien? o ¿Acabas de llegar o ya te vas? o ¿Cómo estás de tu lesión? y preguntas parecidas. Incluso hay días que podemos estar charlando un buen rato.
Todo empezó simplemente saludándonos cuando nos cruzábamos en el gimnasio. Un día alguno de los dos debió hacer algún comentario en el vestuario y el otro respondió, y poco a poco fuimos hablando más.
Sé a qué se dedica, cómo le fue en la última media maratón que corrió y hasta su restaurante favorito, y él conoce cosas parecidas sobre mí. ¿Pero sabes qué?
No sé como se llama.
¿Te ha ocurrido alguna vez?
Un error clásico en las interacciones sociales
A mí no es la primera vez que me pasa y sé que hay bastante gente a la que también le ocurre. Es un error que tiene más trascendencia de la que crees pero por suerte, es de fácil solución.
Llevo un tiempo observando que muchas personas, incluso gente que se dedica a enseñar habilidades sociales o seducción, no pregunta el nombre de la persona que acaba de conocer hasta que se despiden o intercambian contactos.
Para que te hagas una idea, he tenido alumnos (y no pocos) que han estado más de una hora hablando y riendo con chicas que acababan de conocer en un pub y se han despedido sin saber cómo se llamaban. ¿Cómo se explica esto?
El increíble y creciente muro invisible
Se puede explicar por muchas razones: probablemente no saben si esa conversación tan sólo va a durar 30 segundos, o a lo mejor no tienen la costumbre de presentarse hasta que no cogen confianza con la otra persona, o quizás los nervios les juegan una mala pasada y su atención se centra en otras cosas.
Sin embargo, mí me gusta contarlo de la siguiente manera: imagínate que cuando empiezas a hablar con una persona desconocida se empieza a formar un muro invisible entre tú y ella. El muro se rompe en el momento en que os dais el nombre, pero cuanto más tiempo pasa antes, más grueso se hace el muro.
Si te presentas al principio, el muro es fino, fácil de romper sin hacer apenas ruido. Pero si lo haces cuando el muro es enorme, el alboroto y destrozo que harás al romperlo será tremendo. Por eso parecería muy raro que yo, después de dos años de intercambiar comentarios con ese chico en el gimnasio, le preguntara ahora que cómo se llama. Y él tampoco lo va a hacer.
Pero no hay que ir hasta ese extremo. Si ya llevas un buen rato en una conversación con un desconocido, preguntar cuál es su nombre de repente es casi como si le faltaras al respeto, como si se lo hubieras preguntado antes pero se te hubiera olvidado.
Mi consejo es que, cuando empieces a hablar con alguien, no tardes más de un minuto en saber cómo se llama. Esto tiene dos beneficios.
- Lo haces más natural: tiras abajo el muro cuando es más fácil romperlo. Ya no tienes que preocuparte por después.
- Puedes dirigirte a esa persona por su nombre desde el inicio. Y eso tiene la ventaja fundamental que leerás a continuación.
El poder de su nombre
Ya decía Dale Carnegie en su libro Como ganar amigos e influir en las personas que nada le gusta más a la gente que oír su propio nombre. El Sr. Carnegie nos animaba a pronunciar con frecuencia el nombre de alguien mientras hablamos con él porque es el halago más sutil que podemos hacerle.
Parece ser que no se equivocaba, porque en este estudio de resonancia magnética nuclear se corroboró como se activa una región concreta del hemisferio izquierdo del cerebro cuando oímos nuestro nombre que se podría asociar con el placer y la atención.
Por ese motivo es importante que sepas lo antes posible cómo se llama la otra persona y que utilices su nombre de vez en cuando en la conversación. Tampoco abuses o quedará muy extraño.
Si te encuentras en medio de una conversación y te das cuenta de que no sabes cómo se llama tu interlocutor, haz una pausa: “Oye, llevamos un rato hablando y la conversación es tan interesante que hasta se me ha olvidado preguntarte cómo te llamas”.
Cuanto antes empeces a llamar a alguien por su nombre, mejor le caerás.
Cómo preguntar el nombre a tu interlocutor
Sé que la respuesta parece obvia: ¡pues preguntándoselo! Sin embargo hay varias situaciones en las que no está tan claro, por ejemplo:
- Cuando te tienes que ir en 2 minutos pero quieres saber el nombre de alguien que has visto. Quedaría muy raro si te acercaras corriendo hacia él y le dijeras “¡Hola! ¿Cómo te llamas?”, ¿verdad?
- Cuando ya estáis hablando pero notas que es una persona muy desconfiada, sobretodo dentro de en un entorno que no favorece un clima de cercanía, como una discoteca.
- Cuando por lo que sea, existe el riesgo de que te diga “¿Y a ti que te importa?”
La mejor forma de pedir algo es dar algo a cambio tu primero. Así que te aconsejo que primero des tu nombre y luego pidas el suyo: “A todo esto me llamo Pau, ¿y tú?”
Como has dado tu nombre primero, haces muy natural que te dé el suyo a continuación. Incluso puede que la reciprocidad esté jugando a tu favor 🙂
La otra ventaja de que la otra persona sepa cómo te llamas es que, de inmediato, dejas de ser un desconocido. Ahora te conoce por tu nombre. Y a todos nos gusta más lo que conocemos (en el post sobre cómo pedir favores a los porteros encontrarás un ejemplo).
Así pues, preséntate lo antes posible y a continuación pregunta su nombre.
Cómo no olvidar el nombre de alguien
No es infrecuente que mucha gente, nerviosa al conocer a alguien, se olvide al cabo de un rato de cómo se llama la otra persona. ¿Te suena la situación?
En tu descargo diré que es algo lógico. Hay estudios que incluso afirman que el nombre de alguien es el rasgo más difícil de recordar . En un experimento de 1986 se entregaron unas biografías a los participantes y después se les preguntó qué recordaban sobre la vida de las personas que habían leído.
- El 69% recordó la profesión
- El 68% recordó el hobby
- El 62% recordó el lugar de nacimiento
- El 31% recordó el nombre
- El 30% recordó el apellido
¿Por qué ocurre esto?
Varios investigadores creen que, como los nombres son muy comunes, se mezclan en nuestra mente e interfieren entre ellos. Pero la explicación más aceptada es que los nombres, en sí, carecen de significado.
Nuestros nombres no dan pistas sobre nuestra personalidad o aspecto. Si lo hicieran y yo me llamara Toro Sentado, tuviera especto de toro y casi siempre estuviera sentado, seguro que te acordarías de mi nombre (ver investigación del Dr. Fogler). Pero no suele ser así.
- La clave está en el significado. Si no puedes asociar un nombre a algo, se convertirá en una palabra inocua, como Laura, Antonio o Pablo. Pero si mi nombre cobra un significado, por ejemplo me apellido Herrero y trabajo en una herrería, entonces recordarlo te resultará mucho más fácil.
- Una de las mejores formas para recordar un nombre es crear alguna asociación mental con él. Por eso los motes o nicks que se pone la gente son más memorables que el nombre verdadero: porque habitualmente hacen referencia a algún rasgo propio de ellos.
Así pues, si te olvidas de un nombre o alguien se olvida del tuyo, entiende que es perfectamente normal. Puedes volvérselo a preguntar contándole esto mismo que te acabo de explicar para justificarte a la vez que te haces el interesante 😉
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Caro chan dice
Le pongo motes a todos, es la única manera de recordar, y mira que me esfuerzo cuando me presentan a alguien en repetir tres veces su nombre mentalmente mientras me fijo en su rasgo facial más característico…Aun así se me va, pero yo no tengo problemas en decir que soy como Doris (el pez de Nemo) y que mi cerebro se resetea cada 3 minutos así que voy a preguntarles el nombre tantas veces como sea necesario, normalmente no se molestan, se ríen conmigo (o de mi, básicamente) también me ha pasado bastantes veces presentar a una persona e inventarme su nombre (aquí el humor y decir que «Pues tienes cara de Pepe, en vez de Paco, que lo sepas!» me saca de apuros…jajajaja)
Y si, el sonido de nuestro nombre es dulce néctar para nuestros oídos…Ains, ego, ¡cómo te odio! jajaja
Chu!!
Pau Navarro dice
Estupenda tu forma de preguntar el nombre cuando se te olvida Caro, el humor funciona muy bien en estas situaciones. Eso sí, a la quinta vez que se te olvide quizás la situación deje de ser una película de humor para convertirse en un melodrama 😉
Nicol dice
😱🙈🤣
Leire dice
Jajaja a mí me pasa con muchas personas a las que saludo y hablo con ellas pero no sé como se llaman. Me ocurre en el gimnasio también y en la peluquería porque no sé como se llama la chica y siempre hablamos. Ella sí que sabe como me llamo porque me reserva hora.
Es muy importante conocer el nombre cuanto antes! Y ahora entiendo porque muchas veces no consigo recordar los nombres de conocidos que me presentan.
Pau Navarro dice
Si hiciéramos una competición entre tú y yo ver quién se olvida antes del nombre del otro la cosa estaría emocionante, Leire 😉
Andrea dice
Muy cierto lo que comentas. A mí me gusta mucho cuando la persona con la que estoy hablando utiliza de vez en cuando mi nombre, pero tengo que ver que no lo está haciendo intencionadamente para manipulare o algo así, sino que realmente le sale de dentro. Entonces me resulta bastante agradable.
Creo que si notas que la otra persona usa tu nombre de forma manipuladora o poco honesta, puede ser totalmente contraproductente, ¿tú que opinas?
Gracias por otro excelente artículo Pau, un abrazo!
Pau Navarro dice
Hola Andrea, opino como tú. Hay que ir con cuidado con hacer cosas a las que la gente no está acostumbrada, por muy positivas que sean. Si algo no parece natural, seguramente no lo sea. Por eso el exceso se puede percibir muy forzado e incluso manipulativo.
¡Saludos!
Pablo Domingo Montesinos dice
Hola Pau,
Leí este artículo hace tiempo y me encantó.
Después leí el libro de Cómo ganar amigos e influir sobre la gente de Dale Carnegie. Es estupendo que pongas a nuestro servicio estos grandes conocimientos, tan importantes y descuidados muchas veces en la sociedad y educación actuales.
Muchas gracias!
Un saludo, Pablo 🙂
Pau Navarro dice
Muchas gracias por tus palabras Pablo, intento ayudar en lo que puedo 🙂 Como bien dices, aún queda mucho por hacer.
¡Un abrazo!
Laura dice
¡Me encanta tu blog Pau! desde luego que vendré por aquí a menudo. De momento ya me quedo con las 21 preguntas que hacer para conocer mejor a alguien 😀
Un saludo!
Pau Navarro dice
Gracias Laura, la verdad es que también me ha gustado mucho tu blog 🙂 Por motivos profesionales siempre he estado muy ligado al marketing y la creatividad, hasta el punto de que llevo tiempo dándole vueltas a un proyecto relacionado. A ver si en cuanto disponga de más tiempo puedo ponerme a ello.
PD: no he encontrado en tu blog una forma de ver todos los artículos publicados hasta la fecha, ¡quizás pueda resultarte útil!
Un abrazo
alcatara dice
una preguta como ago para reconquistar una chica que apenas llevo conociendo un mes y me puso una prueva y falle porque y me setia celoso que le havle un poco fuerte
Anastasia dice
Hola Pau, gracias por compartir esto, me ha sido muy útil. Que me aconsejas… Hay un chico con el que he platicado en algunas ocasiones (conversaciones cortas) y no se como se llama! Que hago la próxima vez que platique con él? Le pregunto su nombre o me presento primero? Que hago?
Un saludo.
Pau Navarro dice
Hola Anastasia, lo más natural es que te presentes tú y luego le preguntes por su nombre con naturalidad («Por cierto, yo me llamo Anastasia, ¿y tú?»). No tardes en hacerlo porque cuanto mas tiempo pase más raro se hace preguntar el nombre 😉
¡Saludos!
Antonio x3 dice
oye recien me paso que conoci a una chica que trabaja en un puestoo de peliculas cerca de mi casa y emos compartido opiniones y pensamientos acerca de peliculas y musica o cosas por el estilo tambn compartimos cosas un poco mas personales como estudios gustos sueños futuros y asi pero se paso preguntarle su nombre y ella ami tampoco me lo pregunto y no se como preguntarselo ahora pero enserio quiero conocerla pero no se como preguntar su nombre sin sonar extraño que me recomiendas hacer que no sea olvidarme de ella para siempre xD un saludo
Pau Navarro dice
Hola Antonio, pues de dejes escapar ni un segundo más. Piensa que ella también está en la misma situación que tú, y se sentirá rara por no conocer tu nombre.
Si yo estuviera en tu situación me acercaría a su puesto y le diría que el otro día estuviste tan a gusto hablando con ella que se te olvidó preguntarle el nombre. Así de paso también le halagas y subcomunicas que juntos lo pasáis bien 😉 Luego te presentas tú y seguís hablando de otra cosa.
¡Saludos!
kiarynordonez dice
este programaes bien bueno se aprede mucho
Jose A. Galián dice
Tan cierto como la vida misma Pau.
¿A quién no le ha pasado alguna vez que después de llevar un buen rato hablando con alguien, le daba vergüenza preguntarle cómo se llamaba?
A mí me ha pasado miles de veces. Normalmente lo que mejor resultado da es ponerle un poco de humor y toda la naturalidad del mundo.
Yo a veces he dicho: «me ha impactado tanto lo que me has dicho que hasta se me ha olvidado tu nombre, ¿cómo era?»
O el cásico «soy malísimo para los nombres (como casi todos), ¿cómo te llamabas?»
Y hay una técnica que aprendí de un coach hace años que consiste en relacionar el nombre de la persona que acabas de conocer con otra persona que ya conoces y con la que comparte algún rasgo en comun; por ejemplo si acabas de conocer a Paco, y es un chico muy alto, lo puedes relacionar con un profesor que tuviste que también se llamaba Paco y era alto. Aunque parezca difícil encotrar este tipo de coincidencias, no lo es tanto, yo lo he comprobado, porque puedes fijarte en cualquier rasgo: forma de hablar, algún aspecto físico, alguna prenda de vestir…
Saludos….
migel dice
a mi me pasa me bloqeo y no se como desbloqearme algien lo sabe qe me lo diga jjjjjj
Daniel dice
Consulto no sería algúna clase de desatención o enfermedad por.que ami se me pasa casi mucho la desatención distraigo como que no le doy importancia y me sucede más con los nombre de las personas los veo y solo los reconozco por su rostro cuando me dicen fulano de tal hiso yo los miro O.o y digo quien. Whats y hasta que no los veo no los reconozco. T.T
James dice
Hola a todos bueno es interesante el tema bueno en lo peculiar a mi pasa aveces que dan su nombre me olvido pero de su rostro siempre me acuerdo pero siempre los saludo con naturalidad luego les pido su telf. Ese es momento clave digo disculpa como es tu nombre whatsaap decho que dan su nombre. Si funciona. Grasias cuydence. Chicos
alcatara dice
una preguta como ago para reconquistar una chica que apenas llevo conociendo un mes y me puso una prueva y falle que le havle un poco fuerte
Martín dice
Entré al artículo en busca de otra respuesta pero me colgué leyéndolo todo. ¡Brillante contenido!
Ya que estoy acá, me tomo el atrevimiento de preguntarlo; a lo mejor tienen la solución.
¿Cómo le puedo llamar a alguien que, por el tipo de vínculo que tiene conmigo es más que un conocido, pero que dadas ciertas circunstancias no llega a ser un amigo propiamente dicho?
Se formó un debate muy interesante del que no pudimos concluir nada.
¡Muchas gracias!
Ana dice
Por las redes sociales es imposible no saber el nombre
Liliana dice
Yo tengo una duda grande sé que me he equivocado muchas veces al
Demostrar lo contrario con el hombre que amo,pero cada ves que a mi me daba un poco de pena caminar a su lado el
Siempre me decía una frase que decía camina siempre al lado d la persona que amas por que no debe ir ni atrás ni hasta adelante por que no eres su mascota ,y esa frase casualmente se la decía una exnovia y el me la decía a mi,eso será correcto o está mal
Eric Darrell dice
Excelente post!
He leído muchos post sobre relaciones sociales y aún tengo una duda, ¿Aplica el mismo método para conocer a una persona de otro país? ¿Incluso para establecer una conversación con alguna persona famosa?
Ana dice
Hola me ha encantado este artículo, una lectura de sencilla compresión, pero que brinda buen conocimiento.