Hace unos días leí un artículo sobre nuestra esperanza de vida y en qué vamos a invertir el tiempo que todavía nos queda en este mundo.
Era un escrito bastante humorístico porque por ejemplo calculaba el número de pizzas que le quedaban por comer a un treintañero (unas 700, si te pica la curiosidad), pero un apartado en el que hablaba sobre interacciones sociales me hizo reflexionar.
Seguramente porque estos días dan sirven para recapacitar mientras que durante resto del año nuestras preocupaciones nos hacen perder la noción del tiempo.
Así que decidí dedicar un rato a hacer mis propios cálculos sobre el tiempo que me queda no para comer pizza, sino para lo realmente importante en esta vida: nuestras relaciones personales.
Te aviso: las conclusiones me dejaron un sabor agridulce.
La recta final
Primero pensé en mis padres, que están ya entrados en los sesenta. Hasta los 28 años viví de forma estable en su casa, y puedo asumir que en ese período por lo menos el 90% de los días tuve contacto con ellos.
Una vez empecé a vivir por mi cuenta los seguí viendo una media de 15 días al año. Eso significa que, en caso de que sean longevos y alcancen los 90 años, a mis (casi) 35 años vamos a tener contacto solo 375 días más.
Para ser terriblemente gráfico (vale más que mil palabras), a continuación te muestro los meses que ya he estado con ellos y los pocos que todavía me quedan:
O lo que es lo mismo, solo me queda para estar con ellos el 4% del tiempo que vamos a pasar juntos en esta vida:
Es triste, lo sé.
Esto me hizo darme cuenta de lo siguiente: aunque todavía no esté en el tramo final de mi vida, sí que estoy en el etapa final de algunas de mis relaciones más importantes.
Después decidí calcular el tiempo que a un chico de mi edad le quedaba para estar con sus amigos. Aunque los datos mejoraron, tampoco fueron demasiado optimistas.
Pongamos como ejemplo a una persona de 35 años que se casó y tuvo hijos a los 30. Hasta esa edad estuvo en contacto con sus amistades por lo menos en el 50% de los días (es un promedio, en la escuela sería mucho más y a partir de la universidad disminuye).
Luego, una vez con familia, se sigue reuniendo con alguno o varios de ellos un mes al año. Suponiendo que esta frecuencia siga bajando hasta los 90 años de edad, a los 35 ya habrá utilizado el 85% del tiempo que va a pasar con amigos.
A los 35 años solo le queda el 15% de tiempo restante que va a pasar con amigos.
Tampoco es demasiado esperanzador, así que vamos a ver la cara positiva del asunto: el tiempo con nuestros hijos.
Supongamos el mismo caso de antes. Una persona de 35 años que a los 30 forma una familia. En ese caso solo habrá vivido el 17% del tiempo en contacto con sus hijos, y todavía le queda el 83% restante.
Eso sí, que lo aproveche porque cuando se marchen de casa solo lo quedará el 5%.
Si a todo esto añades las relaciones personales son lo que mayor impacto va a tener sobre nuestra felicidad, por encima de los logros personales o profesionales, el panorama no es muy alentador.
La mayoría pasamos demasiado tiempo pensando en nuestro trabajo o aficiones, pero como demostró este estudio científico los acontecimientos que mayor alegría o dolor nos causarán en nuestra vida dependen de nuestras relaciones personales.
¿Qué quiero decir con todo esto?
En estos días de fiestas familiares, donde mucha gente se reúne por única vez en todo el año, quizás convenga hacer una reflexión sobre nuestras prioridades.
Yo lo tengo claro. Una de mis prioridades para este año nuevo es pasar más tiempo con los míos.
Mi edad todavía no me permite ver la vida con la perspectiva necesaria para decidir qué es lo importante y que no, y suelo dedicar mi tiempo a proyectos profesionales y hacer planes para el futuro.
Por eso conviene escuchar las personas que llevan más tiempo que nosotros en este mundo o que ven que sus días están acabando. Porque la mayoría de ellos lamentan no haber podido pasar más tiempo con su familia y amigos.
10 claves prácticas para cuidar tus relaciones personales
Una vez terminada esta reflexión sobre la importancia de dedicar tiempo a tus relaciones personales, quiero aportar 10 claves (científicas, como siempre) para que por lo menos, cuando estés con ellas, disfrutéis al máximo de vuestro tiempo juntos.
1. Expresa más gratitud
Si tuviera que elegir un único consejo de todo este artículo para mejorar la calidad de tus relaciones, seria este.
Se ha demostrado en estudios sociales que el mero hecho de expresar gratitud a los demás por algo que han hecho, por muy pequeño que sea, tiene un maravilloso efecto fortalecedor sobre vuestra relación a corto y medio plazo.
Agradece cosas como la comida que te han preparado, que te hayan ido a recoger a la estación o que simplemente hayan pensado en ti. La calidad de tus relaciones también lo agradecerá.
2. Nunca te vayas a dormir enfadado
Todos nos podemos enfadar y discutir. Pero si hay una cosa importante cuando esto ocurre, es intentar tener alguna palabra amable con los demás antes de terminar el día.
En primer lugar, y como mucha gente mayor te recordará, porque nunca sabes qué puede pasar por la noche. En segundo lugar, porque oficializas que el enfado acaba con el día. Y finalmente, porque el último recuerdo es el que suele prevalecer.
Y seremos más felices si es agradable.
3. Recuerda momentos donde reísteis mucho
Para fortalecer tus relaciones no hace falta que os vayáis juntos de vacaciones a la India. Simplemente con recordar aquella situación en que tú y tus amigos o familiares no podíais parar de reír será suficiente.
Se ha demostrado que rememorar momentos donde todos os reísteis a carcajada suelta es incluso más beneficioso que acordarse de otros grandes eventos como viajes o ascensos laborales.
4. Por favor, deja de intentar cambiar a los demás
Según el especialista en relaciones John Gottman, el 69% de tus problemas en una relación no pueden resolverse.
Nos pasamos años luchando para cambiar la mentalidad de nuestra pareja, padres o amigos, pero simplemente no es posible. El motivo es que la mayoría de nuestros desacuerdos se basan en diferencias fundamentales en nuestros valores o personalidad.
Sé consciente de que en cualquier relación, por muy idílica que quieras que sea, habrá problemas irresolubles con los que tendrás que aprender a convivir. O lo asumes, o vivirás infeliz todo el tiempo que dure.
5. Es más importante ser justo que tener la razón
Es inevitable que haya desacuerdos entre cualquier tipo de relación, ya sea de amistad, familiar o profesional. ¿Pero qué puedes hacer en estos casos?
Si tu prioridad en las discusiones es tener la razón quizás estés alimentando tu ego, pero desde luego estarás desnutriendo la relación.
El motivo es que habitualmente este tipo de conflictos son cuestión de perspectiva y no de hechos (me refiero a política, deporte, etc) por lo que es imposible tener “la razón”.
En esos casos es mucho más importante ser justo y escuchar a todo el mundo para ver las cosas desde su perspectiva. Se ha comprobado que percibir que estás siendo justo es 8 veces más eficaz para mantener la calidad de la relación que si simplemente aceptan que estás en lo cierto.
6. Di las cosas buenas de tu día
Está más que demostrado que llevarte los problemas a casa o a tus reuniones con amigos no ayuda.
Más bien todo lo contrario. Existe evidencia científica de que crear el hábito de explicar lo mejor que te ha ocurrido durante el día a las personas que ves habitualmente (pareja, padres, hijos) sirve para fortalecer el afecto en tu relación y reforzar vuestros lazos emocionales.
7. Crea vuestros propios hábitos y rituales
Por muy molestos que te puedan resultar, crear rituales familiares (acudir todos a casa de los padres para Navidad, tener rutinas de baño con los hijos, etc) o con las amistades (cenar juntos cada dos semanas, por ejemplo) sirve para crear conexiones más profundas entre vosotros.
Estudios como este demuestran que formar hábitos de este tipo incrementa en más de un 17% el sentimiento de unión familiar o personal que cuando no existe ningún patrón habitual.
8. Aunque te cueste, intenta ser optimista
En los momentos más difíciles o tristes, como en la enfermedad o el paro laboral, es complicado que no nos inunde el desánimo.
Sin embargo se ha comprobado en entornos familiares que si alguien colabora con una visión optimista sobre el futuro es capaz de reducir el estrés y ansiedad del resto de miembros en un 60%. Aunque por dentro esté pensando otra cosa.
Esto no significa que debas poner una sonrisa a cualquier precio. Puedes sentir la tristeza y el dolor junto los demás, pero contribuye mostrando la posibilidad de un futuro mejor.
9. Las mascotas ayudan a tener esperanza
Si en el punto anterior he comentado la importancia de mostrarte optimista, aquí va un pequeño truco para ponértelo un poco más fácil: adopta un perro (¡o gato!).
Estudios como este demuestran que aquellas personas que están pasando por un mal momento familiar se sienten un 22% más esperanzadas con su situación si hay un animal de compañía en su vida.
Así que ya sabes: compartir tu vida con una mascota puede terminar salvando tus relaciones personales 🙂
10. Muestra tu afecto a los que más quieres
Otra de las indispensables de esta lista. ¡Qué fácil es decirlo y cuán a menudo se nos olvida!
Se ha comprobado científicamente que decir a tus allegados que los quieres causa una profunda felicidad en los demás. Y además contribuye de forma maravillosa a la relación, consiguiendo que la gente se sienta un 47% más unida a las personas que les expresan su afecto de forma habitual.
Si tuviera que hacer una lista de lo que menos cuesta y más felicidad puede crear mientras vivimos, probablemente esta sería la número uno.
Póntelo fácil
Ahora ya conoces varias claves para priorizar y fortalecer tus relaciones, pero hay un último aspecto que puede marcar la diferencia: vivir en el mismo lugar que la gente que te importa.
Si tienes la suerte de poder hacerlo, esta es la forma más sencilla de mantener el contacto.
Probablemente termines viendo 10 veces más a tus padres y amigos si vives en la misma ciudad que ellos. Por eso mucha de la gente que de joven sueña con viajar deja de hacerlo cuando le empiezan a dar importancia a otras cosas. La sabiduría de la experiencia 😉
Una última reflexión
No pretendo que este sea un post triste, sino motivador.
Un post que nos haga reflexionar sobre aquello que creemos que va a durar para siempre, como nuestros padres, los ratos con nuestros amigos o el tiempo con nuestros hijos. Pero que a la que nos demos cuenta, ya no estará.
Según el momento de tu vida en que estés te quedará más o menos tiempo, pero en cualquier caso seguro que no es demasiado. Así que aprovéchalo. Soluciona viejas disputas, pide perdón y di te quiero. Nada te hará más feliz.
¿Mi último consejo? Piensa en las 15 personas más importantes de tu vida y comprueba si en los últimos seis meses les has dicho lo que significaban para ti.
Si no, estos días son el mejor momento para hacerlo.
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Andrea dice
Enorme artículo Pau, realmente no me había parado a pensar en el tiempo que me queda para algunas cosas importantes en la vida (las relaciones como bien dices) y me has hecho pensar bastante porque precisamente estas han sido las primeras Navidades que ha faltado una persona importante de mi familia en la mesa.
Muchas gracias por tus artículos, un abrazo.
Pau Navarro dice
Gracias a ti Andrea, yo cada vez que me sorprendo demasiado obsesionado con mi trabajo o proyectos vuelvo a hacer esta reflexión porque me ayuda a tomarme las cosas con mucha más perspectiva y quitarme presiones.
¡Un abrazo!
Luis Don dice
Jolín Pau, menuda reflexión 🙂 No lo había pensado así nunca pero tienes razón. En mi caso todavía más porque desde los 20 años que vivo fuera por lo que tengo ya menos contacto con mis padres aunque para Navidades y en verano siempre los veo.
Con mis amigos, pues he ido cambiando sobre todo cuando me mudé de ciudad, y ahora intento que mi vida social sea más activa porque la verdad es que estaba bastante acomodado.
Tomo nota de tus consejos para ponerlos en práctica, el punto de los perros me lo guardo porque estoy convencido de los beneficios de tener un animal de compañía!
Pau Navarro dice
Gracias por comentar Luis, créeme si te digo que dedicándole un poco más de tiempo y cariño a nuestra vida social los malos momentos de la vida se hacen mucho más llevaderos. No hay nada más gratificante que estar un poco chafado y recibir un mensaje de un amigo que ha pensado en ti.
¡Saludos!
Rosi dice
Una recolección de consejos con aval científico que nos da que pensar y que viene muy bien como siempre, felicidades por el blog y sigue con tu buen trabajo.
Un saludo
Pau Navarro dice
Gracias Rosi, seguiremos al pie del cañón 😉
¡Saludos!
Irene dice
Hola! Ante todo te agradezco y felicito por tu trabajo con este blog, que personalmente me parece interesantísimo y bastante útil.
Partiendo de la base de que esto te lo podría y debería haber dicho mucho antes, hoy lo que me mueve a escribir es una puntualización sobre el tema de las mascotas. Ya sé que es una frase hecha y es probable que por eso esté así escrita, pero el lenguaje es importante y creo que el verbo «comprar» nunca debería ir en la misma frase que el nombre de un animal. Los amigos no se compran. Hay miles de perros y gatos de todas las razas, colores y pelajes esperando un hogar y siendo sacrificados en perreras y protectoras, y miles de perras y gatas criando esclavizadas cachorros para la venta. Y, para acabar con eso y mientras no cambien las leyes, veo necesario empezar por, como mínimo, cuidar el lenguaje que utilizamos a la hora de hablar de estos temas.
Un saludo, y de nuevo gracias por tu trabajo :-).
Pau Navarro dice
Gracias por la puntualización Irene, la verdad es que ni siquiera había pensado en ello cuando escribía el artículo (yo nunca he tenido animal de compañía) pero estoy totalmente de acuerdo. Supongo que me ha invadido el espíritu navideño de las compras y me ha salido así.
¡Ya está corregido! Creo que la palabra adoptar le hace mucha más justicia a esta realidad.
¡Saludos!
Cris dice
Tremenda reflexión que me ha servido para emocionarme y ser más consciente de la importancia de cuidar las relaciones personales. Les he pasado el post a mis amigos y familiares a toda velocidad. Gracias, Pau.
Pau Navarro dice
Gracias Cris, un abrazo y feliz entrada de año nuevo 🙂
Lara dice
Brillante artículo que viene muy bien en estas fechas. Comulgo con todos y cada uno de los puntos que comentas, yo también haré el propósito este año nuevo de pasar más tiempo con mi familia y amigos y decirles lo mucho que representan para mí (aunque a veces cueste).
Un abrazo y gracias por tu trabajo
Pau Navarro dice
Cuesta muchísimo Lara, estoy de acuerdo. No porque no queramos, sino porque se nos olvida, y por nuestra naturaleza humana tenemos la tendencia de convertir en montañas las pequeñas preocupaciones del día a día. Y eso no nos deja ni un segundo para reflexionar.
Un abrazo y gracias por comentar 🙂
Jesús dice
Ohú. He tenido que tragar un par de veces saliva tratando de deshacer el nudo que tenía en la garganta!!
Un gran artículo para reflexionar sobre nuestras relaciones y sus inevitables fechas de caducidad. Tomar consciencia de ello y pensarlo es un primer y gran paso. Y qué mejor momento que estas fechas para hacerlo, que tanto se prestan a ello!!
Después toca tomar acción. Ya nos has dejado una buena ristra de buenos hábitos relacionales para incorporar.
¿Cuál se te pasa a ti por alto? … Yo tengo cuentas pendientes con el punto 4 (no intentar cambiar a los demás) y con el 10 (verbalizar el afecto abiertamente). Creo que los trabajaré en este 2016 que entra, jeje.
Muy grande el artículo Pau!!
Espero que tengas un gran final de año y entrada al 2016!!
Pau Navarro dice
Muchas gracias Jesús 🙂 A veces conviene hacer estas reflexiones, porque a menudo me encuentro con proyectos de año nuevo como «ir al gimnasio», «cambiar de trabajo» o «viajar más», y sin embargo lo que ha demostrado una y otra vez ser más importante apenas tiene presencia.
Yo quiero (iba a poner «tengo» pero es una palabra prohibida en el desarrollo personal 😉 ) mejorar el primer y último punto, sobretodo porque creo que son los más importantes y los que menos cuestan.
¡Un fuerte abrazo y te deseo un maravilloso 2016!
Ali dice
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS.
Por todo: por este artículo, por tus reflexiones, por escuchar, por compartir, por estar…
No espero ni quiero una respuesta, simplemente… Invierte ese tiempo en decir… Lo que quieras decir (o hacer).
A por el 2016, Pau!!
Un fuerte abrazo!!
Ali
Pau Navarro dice
Muchas gracias Ali, realmente sabes hacer sentir muy bien a la gente y conmigo lo has conseguido al cuadrado 🙂
Un abrazo enorme, estoy convencido que harás que el 2016 sea un año maravilloso. ¡Y nos veremos para comentarlo!
Pau
Patricia Aragón Chávez dice
Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices, para mi la navidad y el año nuevo no son suficientes para visitar a familiares o amigos, eso es una costumbre, un compromiso, mercantilismo.
Todo el año, debemos decirle a nuestra familia que la amamos, decírselo de mil maneras con el tono de voz, con una mirada, con una llamada inesperada para preguntar como se encuentra,o haciendo un regalo para entregarlo por el placer de darlo, sin que sea una fecha especial.
La forma como nos relacionamos con los otros es una manera de predecir un poco nuestro futuro, si uno no sabe cultivar amistad y amor es muy difícil que al final de la vida pueda uno cosecharla.
El amor no se improvisa, se siembra, se cuida, se atesora y nos da regalías, la paz con nosotros mismos, el orgullo de actuar adecuadamente, la sonrisa de los otros, cuando nos ven o recuerdan.
Pau Navarro dice
Muchas gracias por tu gran reflexión Patricia, me ha gustado mucho cuando dices que la forma como nos relacionamos con los otros es una manera de predecir nuestro futuro, me la apunto 🙂
Ahora lo importante es que todas estos pensamientos que hacemos en estas fechas no se queden solo en eso y se traduzcan en actos durante todo el año. ¡Estoy convencido de que lo conseguiremos!
Un abrazo
Jose dice
Menudo artículo para acabar el año Pau!! Me lo he leído varias veces para asimilarlo bien…voy a tener presente los consejos que das para aplicarlos estos días y durante este año que llega…empiezo a experimentar mejoras con todos los consejos del blog por lo que te agradezco especialmente el trabajo que haces y te deseo lo mejor para el 2016!!
Pau Navarro dice
Hola Jose, ¡y feliz 2016 también para ti! (disculpa el retraso)
Me alegro que veas mejoras con los contenidos del blog. ¡Con perseverancia la mayoría de ellos han demostrado cientificamente que funcionan!
Un abrazo fuerte
Diana Garcés dice
Qué bonito post Pau, me ha encantado y el mensaje final creo que lo dice todo, pues pensar en esas 15 personas me ha hecho darme cuenta de que la distancia no es impedimento alguno para estar al tanto, para estar «presente».
Obviamente nada cambia un abrazo dado a tiempo o un «estar ahí» cuando se necesita. Sin embargo, a veces los que están más lejos son los que nos hacen darnos cuenta que no estamos solos porque precisamente «siempre encuentran la manera de estar ahí» 🙂
Un abrazo y feliz 2016 que disfrutes de esas relaciones personales que enriquezcan tu vida y tu espíritu 🙁
Pau Navarro dice
¡Hola Diana! Como bien dices la distancia no es impedimento, lo importante es que sientan y sintamos que estamos presentes 🙂
Te deseo un 2016 lleno de alegrías y aventuras, que seguro que las tendrás 😉
¡Un abrazo fuerte!
Miguel Ángel M. dice
Primeramente felicitarte Pau por tu espléndido blog, llevo unos cuantos meses siguiéndolo con todo lujo de detalle. Aunque esta es la primera vez que me aventuro a dejarte un comentario. Quizás como bien se dice, proponerse pequeñas cosas para año nuevo que apenas suponen un esfuerzo en tu vida cotidiana como pueda ser leerse una página de 1 libro cualquiera antes de acostarse, haya hecho que me aventure a escribirte.
Es sorprendente que, como bien han dejado reflejado, conforme va pasando nuestra vida y crecemos, tenemos menos tiempo para dedicárselos a nuestros seres queridos. Yo no sé si podré intensificar en mayor o menor medida el tiempo que les pueda dedicar a estas personas. Pero lo que sí esté en mi mano, gracias a la consciencia del recuerdo cómo has conseguido tú en esta ocasión con tu post, como es ganar en “calidad de relación” con ellos, voy a hacer todo lo que esté en mi mano para mejorarlas.
Finalmente decirte que leyendo esto, me he acordado de una cita que me gusta mucho de Benjamin Franklin que dice así: “Sé amable con todos, sociable con muchos, íntimo con pocos, amigo de uno, y enemigo de nadie.”
Solo me queda desearte un Feliz 2016, un fuerte abrazo.
Pau Navarro dice
Hola Miguel Ángel, y gracias por estrenarte comentando 🙂
La calidad de nuestras relaciones es tanto o más importante que el tiempo que pasemos con ellas, como bien comentas. Y me uno a la cinta de Benjamin Franklin, me parece que resume muy bien una de las principales claves para ser más feliz.
¡Que tengas un año genial y un fuerte abrazo!
El cerebro de Jack dice
Le ha encantado a mi madre jaja. La republicamos en Conquista Tus Miedos y accedió a esta entrada pensando que era mía ;-). Dice que al principio la deprimiste un poco pero que el artículo va in crecendo y que le ha encantado. Le he dicho que de mayor quiero ser como tú xD.
Bromas aparte(mi madre piensa eso de verdad ¡eh!), articulazo como siempre. Leerte a ti es apuesta segura.
El cerebro de Jack dice
Y de paso…¿me dices que plugin usas para los comentarios? 🙂
Pau Navarro dice
Muchas gracias, ¡me alegro que os haya gustado! Tener lectores como tú es un lujo, así que estoy doblemente contento 🙂
Por lo que respecta al plugin de los comentarios… la verdad es que no uso ninguno. Es el sistema estándar que venía con este tema de WordPress (Metro Pro de Genesis). ¿Te refieres a esto?
¡Un abrazo!
Lara dice
Pau me sorprendiste. Desde niña tengo esa sensación de ¿Cuánto tiempo paso con ellos? ¿Estoy aprovechando al máximo estas personas que amo? Sin embargo siempre siento que no. El problema es cuando tu eres conciente pero los que amas no. Desde ya mi familia es bastante individualista, para que te des una idea no tenemos sala de estar, solo compartimos momentos en la mesa del comedor. Pero ¿que se le puede hacer? A fin de cuentas no tenemos porque culparnos de este tiempo que nos queda, sabemos que el tiempo no espera a nadie. Obvio mientras más puedas ver a la gente que amas mejor. Pero también recuerda que en todo ese tiempo que tenemos de vida también vas a querer hacer cosas para ti y si no las haces también te sentirás mal, sino mira a las típicas amas de casa que cuando sus hijos se van de la casa sienten que no hicieron nada de su vida. Básicamente es un sentimiento normal en los seres humanos el ser inconformistas. Lo que me parece importante es la calidad del tiempo, pocas peleas, pocas criticas no constructivas y muchas risas y cumplidos y si podes invitarlos a que te acompañen en tus planes 🙂 Es mi humilde opinión tal vez te sirva para no dejarte con un sabor tan amargo.
Pau Navarro dice
Gracias Lara 🙂 Me parece que haces una reflexión acertadísima. La calidad de nuestras relaciones es incluso más importante que la cantidad, así que no puedo estar más de acuerdo.
De hecho en el último artículo hablo de un estudio realizado durante 75 años que precisamente dice eso. Así que aprovechemos el tiempo mientras podamos y no nos dejemos nada en el tintero.
Un abrazo fuerte y gracias por comentar
Stefan Lakovic dice
Eres un crack, cada articulo es mejor que el anterior, y aporta una cantidad de información increible. Estas navidades aplique el punto de la gratitud, escribir un mensaje, en algún caso un audio, agradeciendo que sean parte de mi vida y lo las buenas cosas que me aporta. Me di cuenta que a casi ninguno de ello le había dicho nunca «Te Quiero». Esta vez decidí hacerlo y el resultado fue espectacular.
Un saludo
Pau Navarro dice
Gracias a ti Stefan, saber que tu resultado fue tan bueno seguro que anima a varios lectores a seguir tu ejemplo. Felicidades y gracias por compartirlo 🙂
Un abrazo fuerte
Abigail de la Rosa. dice
Tienes toda la razón!!!
Muy buenos puntos que tomas en cuenta, la verdad me has hecho pensar mucho sobre lo que realmente importa y de lo necesario para estar mejor tanto conmigo misma como con las personas que amo!
¡mil gracias!
gracias por este blog; me ha sido muy útil.
Abigail.
mcopola dice
Gran articulo. Gracias 🙂
joffre De la A dice
Exelente articulo muchas veces ,habemos personas que tenemos noción de todo aquello pero no sabemos como expresarlo o no tenemos claro ciertas cosas , pero en la búsqueda de respuestas , la perseverancia de defender nuestros ideales porque sabemos que estamos siendo justos y asertivos y la lectura nos abre estas puertas para encontrarnos con personas excelente que dan un buen aporte a la humanidad como este Este excelente articulo . gracias 👍👍👍 esto es como que ordeno mis ideas y ahora siento que me.han dado una buena razón para limar asperezas con mi padre y compartir mas con el .👍👍👍👍
Samuel dice
Hola Pau, muy bueno estas reflexiones, pero me ha dado curiosidad algo, ¿Crees que veamos de nuevo nuestros familiares después de la muerte? y gracias por escribir a través este medio y hacernos reflexionar así como llenar de nuevos conocimientos. Sigue así.
Saludos.